K-Dam: Protección avanzada y precisión en procedimientos dentales sin irritación.
El producto K-Dam de Kiyomi Dental es una innovadora barrera gingival diseñada para proteger los tejidos blandos durante diversos procedimientos odontológicos, tales como blanqueamientos y tratamientos de microabrasión. Una de sus características más destacadas es su alta tixotropía, lo que significa que no se escurre durante su aplicación, permitiendo un control preciso en el área de trabajo y facilitando un aislamiento efectivo.
El valor diferencial de K-DAM
K-Dam se conoce como un «dique líquido» porque actúa como una barrera que protege las encías sin causar irritación, un aspecto crucial en la experiencia del paciente. Su aplicación directa permite una fácil manipulación y retirada al finalizar el tratamiento, haciendo que tanto los dentistas como los pacientes se beneficien de su eficacia y simplicidad.
Una de las ventajas más importantes es su capacidad de absorber la luz y mantener un control dimensional preciso. Esto asegura que K-Dam se cure de manera adecuada bajo la luz de fotopolimerización, optimizando la duración del tratamiento y evitando complicaciones que puedan surgir de una aplicación deficiente.
¿En qué procedimientos destaca?
K-Dam es particularmente eficaz en tratamientos de blanqueamiento dental y microabrasión, donde la protección de los tejidos blandos es fundamental para evitar irritaciones o daños provocados por los agentes blanqueadores, como el peróxido de hidrógeno. Además, su capacidad para delimitar el área de trabajo mejora la precisión del tratamiento, ayudando al odontólogo a aplicar el producto con mayor exactitud.
Otra de sus aplicaciones clave es en el aislamiento auxiliar, proporcionando un sellado firme en tratamientos que requieren un aislamiento absoluto de piezas dentales individuales. Esto resulta especialmente útil cuando el uso de un dique de goma no es necesario o conveniente.
Comodidad y seguridad para los pacientes
La formulación de K-Dam está pensada para maximizar la comodidad del paciente durante el tratamiento. Al evitar la irritación de los tejidos gingivales, se reduce la posibilidad de efectos secundarios, como sensibilidad dental o quemaduras, mejorando significativamente la experiencia en el sillón dental. Este aspecto no solo mejora el bienestar del paciente, sino que también incrementa la confianza del profesional al saber que está utilizando un producto seguro y eficaz.
Beneficios para los profesionales del sector.
Para el odontólogo, K-Dam representa una solución versátil y eficiente que optimiza tanto el tiempo de trabajo como la calidad del tratamiento. La facilidad con la que se aplica y retira, sumada a su alta precisión, permite que los profesionales trabajen con mayor fluidez, reduciendo tiempos y mejorando los resultados clínicos.
En resumen, K-Dam es más que una simple resina fotocurable. Es una herramienta indispensable para los tratamientos dentales estéticos y restauradores, aportando seguridad, precisión y comodidad tanto para el profesional como para el paciente.
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